jueves, 3 de febrero de 2011

Bueno comenzamos hoy el blog. Como primera entrada hablaremos de las exposiciones de los bloque 1,2 y 3 de Didáctica de la Educación Artística, y lo que se me hace más importante es caer en la cuenta de la dificultad que tiene crear una especie de unidad didáctica para la función de transmitir los conocimientos propios de la Educación Artística. No obstante, imaginaros hacer esto con otras materias.

A propósito de nuestra presentación (Bloque 3; Mar, Mercedes, Juanjo, Fran, Inma y yo mismo), explicaros que nuestra intención no era más que la de experimentar con los diferentes enfoques propuestos en diferentes épocas desde mediados del s.XX. Nuestra intención no era mostraros cada uno de ellos, sino haceros partícipes de dicho método de enseñanza-aprendizaje. No sé si al final se consiguió, pero la intención, ahí queda.

Por otro lado agradeceros vuestra participación, aunque creo que en un aula de secundaria, esto sería algo más complicado de realizar. Ahí tenéis algunas fotos.










En esto del mundo del arte, lo que yo saco en claro de lo que llevamos de módulo es, como decía la canción de Serrat (letra de Antonio Machado) "Caminante no hay camino, se hace camino al andar". Lo importante no es que el resultado de la expresión artística, entendida como obra u objeto de arte, sino el proceso que ocurre. No se busca una meta (en este caso sería la creación de artistas) sino una creación de personas, librepensadores que tengan al arte como vehículo de aprendizaje, de expresión, y cómo no, como vehículo para la formación integral de la persona. 



De lo expuesto hasta ahora, parece que nos deberíamos quedar con la autoexpresión creativa; yo discrepo de esa afirmación, ya que no creo que la documentación, información, cultura, etc... influyan de forma negativa o mermen la capacidad creativa de nadie, más bien todo lo contrario. En este mundo donde la información se ha convertido desde hace tiempo en un bien más de consumo, se ha sustituido la fiebre del oro por la fiebre de la información. No podemos prescindir de ella, no podemos quedar a lado de este camino. El conocimiento per se no es negativo, además dicho conocimiento hace crecer un mestizaje entre los diferentes trabajos de los artistas. La utopía de pensar que este conocimiento nos condiciona, es tanto como pensar-creer, que sin dicho conocimiento quedaríamos libres de influencia.

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